LA CAJA

¿Crees que la verdadera amistad no entiende de diferencias, sólo de corazones dispuestos a confiar y compartir?

En "La caja" (2017, "La Boîte" en francés), un conmovedor cortometraje de animación francés dirigido por Joran Rivet y Elliot Belrose, se cuenta la historia de un anciano persiguiendo a un pequeño ratón que se esconde dentro de una caja. Pero más allá de la trama aparentemente simple, este corto nos regala una reflexión emotiva sobre el respeto y la empatía.

En este relato, la caja va más allá de ser simplemente un contenedor físico. Actúa como un símbolo potente que representa tanto la captura como la contención. Inicialmente, el anciano intenta atrapar al ratón, reflejando su deseo de controlar y limitar su presencia en su vida. Sin embargo, cuando el anciano se enfrenta a la decisión de qué hacer con el ratón atrapado, la caja se convierte en un dilema moral. Es la encrucijada entre hacer daño o mostrar compasión y libertad.

La decisión final del anciano de no dañar al ratón y aceptarlo como compañero transforma el significado de la caja. Ahora simboliza la apertura a la compasión, la aceptación y la conexión. Se convierte en un emblema de la nueva relación basada en el respeto mutuo y la amistad.

Desde la perspectiva de la inteligencia emocional, "la caja" ofrece valiosas lecciones:

Nos muestra la importancia de la empatía al ponerse en el lugar del otro, el autocontrol al resistir impulsos destructivos, y la resolución de conflictos mediante la reflexión y la consideración de las consecuencias.

Además, ilustra la adaptabilidad y la apertura mental al abrirse a una nueva perspectiva de cómo percibir al ratón y la importancia de reconocer y comprender nuestras emociones para manejar adecuadamente las interacciones sociales.

La historia del ratón, que pasa de la desconfianza a la aceptación, también nos recuerda la importancia de aprender a confiar:

El ratón actúa con cautela y desconfianza al principio, lo cual es comprensible ya que se encuentra en un entorno desconocido y se enfrenta a una situación potencialmente amenazante al ser atrapado por el anciano. Sin embargo, a medida que el anciano demuestra repetidamente su intención de no hacerle daño y le ofrece amabilidad y hospitalidad, el ratón comienza a confiar en él.

El momento en que el ratón finalmente acepta el pan que le ofrece el anciano es un punto crucial en el desarrollo de la confianza entre ambos personajes. Este simple gesto indica que el ratón está empezando a sentirse seguro y cómodo en presencia del anciano, lo que marca el inicio de una relación de confianza mutua.

¡Nos seguimos maravillando con el poder de los cortometrajes para hacernos sentir emociones sin diálogos y en un reducido espacio de tiempo! 

REFLEXIÓN FINAL: "En el pequeño espacio de una caja se esconde un cofre mágico donde se guardan varios tesoros invisibles: la confianza como llave, el respeto como tesoro, la amistad como joya y la empatía como luz que guía".