"Si quieres crear una nueva realidad personal, tienes que convertirte en otra persona". Joe Dispenza.
Joe Dispenza es un reconocido neurocientífico estadounidense, médico quiropráctico, speaker y escritor. Nacido el 22 de marzo de 1962. Hace años sufrió una lesión muy grave que lo dejó incapacitado para andar de la que consiguió recuperarse sin someterse a ninguna operación, cuando los médicos sostenían que era imposible. Su inquietud interna sobre cómo opera el cerebro, cómo almacena la información y cómo perpetúa los mismos patrones una y otra vez junto a una creencia firme de que la mente es capaz de sanar el cuerpo, lo llevó a investigar las capacidades del cerebro, empapándose de conocimientos en medicina, bioquímica, neurología y neurofisiología .
Según explica él: "Investigué las remisiones espontáneas de enfermedades y analicé que tenían en común las personas que lo conseguían, luego decidí reproducirlo y todo lo que es reproducible se convierte en una ley. La vibración amorosa lo sana todo. Si te sanas a ti mismo sanas a los demás".
Es protagonista de la serie de documentales "Rewired" y apareció en el tan conocido documental ¿¡Y tú qué sabes!?, mencionando con una seguridad aplastante una frase gloriosa que ha logrado convertirse en una afirmación: "Me despierto por la mañana y conscientemente creo mi día tal como quiero que ocurra".
"El universo te apoya y actúa a tu favor. ¡Qué gran placebo!¿Cómo pensarías, vivirías y andarías por la calle si creyeras que el universo te apoya?".
Joe Dispenza.
Supe de él, creo recordar, a través de uno de sus libros más famosos: "Deja de ser tú", lo que abrió mi inquietud a seguir conociéndolo. Entre sus libros destaco: "El placebo eres tú", "Sobrenatural" y "Desarrolla tu cerebro". Lo que más me fascina de él es cómo mezcla lo científico con lo emocional e incluso espiritual:
"La mente determina la experiencia exterior porque todo se reduce a campos de energía, de modo que nuestro pensamiento altera constantemente nuestra realidad, es posible cambiar circunstancias de la realidad si sabemos cómo".
y desde aquí te reta:"¿Puedes aceptar la idea de que una vez que cambias tu estado interno, no necesitas que el mundo externo te brinde una razón para sentir alegría, gratitud o aprecio?
Aquí comienza todo, aceptando que la mente crea nuestra realidad y por ende el mundo interno es el precursor de la realidad que experimentamos.
"Siempre estamos creando un futuro, lo que pasa es que solemos crear el mismo, reafirmamos nuestra personalidad, vivimos dirigidos por una serie de pensamientos, conductas y reacciones emocionales memorizados (temor, culpabilidad, falta de autoestima, enfado, prejuicios) que son muy adictivos y que funcionan como programas informáticos instalados en el subconsciente. No podemos crear un nuevo futuro, aferrándonos a las emociones del pasado". Joe Dispenza.
Tras estas pinceladas de sabiduría, nacen unas creencias firmes y sostenidas de que la mente y el cuerpo deben trabajar unidos. Su visión es el resultado de su propia experimentación y justo en esto radica su éxito. Sus palabras se acompañan con sus propios resultados. Su misión es mostrarle al mundo que si para él y otros fue posible la sanación y una vida mejor, para nosotros también lo es.
"Una vez que tenemos una visión, nuestro comportamiento debe responder a las intenciones. La mente y el cuerpo deben trabajar juntos".
¿Te animas a indagar un poco más en su pensamiento?
1. "Aprender es formar nuevas conexiones en el cerebro y la memoria es mantener esas conexiones. Aprender no es suficiente. Se debe aplicar lo que aprendes y cuando empiezas a experimentar las emociones de esa experiencia, entonces literalmente das nuevas señales a tus neuronas y creas nuevas sinapsis: A eso se le llama evolución. Si podemos aferrarnos a una idea, comenzamos a cablear y a dar forma a nuestro cerebro."
Como bien comenta Joe, el aprendizaje surge de la repetición y la automatización. Es un proceso activo, hoy se sabe que el cerebro utiliza aprendizajes anteriores para ir ampliándose o incluso transformándose, con lo que podemos concluir que aprender es cambiar nuestro cerebro. Normalmente cuando hablamos del cerebro caemos en el error de compararlo con un ordenador, yo misma en muchas explicaciones lo he hecho, porque sí que es muy asequible para explicar cómo nos programamos. Pero es importante comprender que nuestro cerebro es mucho más que un ordenador. En un ordenador los documentos no se modifican, los documentos guardados se mantienen en el tiempo intactos. En cambio el cerebro está en continua evolución, no hay ningún programa o recuerdo que no se modifique continuamente. Pero siguiendo con lo que nos ocupa, aprender es también experimentar eso nuevo, darle una utilidad y con la emoción de esa experiencia ir creando un nuevo trayecto neuronal.
"Si hacemos algo una vez y otra y otra más, por el mero hecho de estar repitiéndolo, el proceso de aprendizaje de lo que quiera que estamos haciendo empieza a ser simple y a hacerse automático. Empieza a resultarnos familiar. Empieza a ser fácil. Empieza a ser natural y empieza a volverse subconsciente". Joe Dispenza.
2. "Somos adictos a nuestras creencias, somos adictos a las emociones de nuestro pasado. Vemos nuestras creencias como verdades, y no como ideas que podemos cambiar.
¿Y si nuestras creencias en vez de dogmas fueran propuestas? ¿Y si en vez de verdades fueran alternativas?
Por un lado, seríamos más libres porque nos preguntaríamos cada día quiénes queremos ser para solventar nuestros retos diarios en vez de asumir limitaciones pasadas. Nos daríamos la oportunidad de crecer, aprender, expandirnos. Responsablemente utilizaríamos la información que nos proporciona el cerebro para descartarla o para afianzarla con nuestra experiencia o quizás para reestructurar la información con la parte de la alternativa que nos puede ser útil.
Y todo esto se resume en palabras de nuestro personaje así:
"Una persona que repite los mismos pensamientos, las mismas creencias y los mismos dogmas infalibles crea un cerebro que no cambia, vive en la misma mente cada día."
3. "Los cambios verdaderos consisten en ser consciente de tus reacciones inconscientes. Es en el inconsciente donde ocurre el cambio de nuestros programas mentales. El simple pensamiento positivo no funciona, porque la negatividad está instalada en nuestro subconsciente".
Dispenza explica en multitud de ocasiones cómo nuestros pensamientos actuales parten de emociones instaladas en nuestro cuerpo a partir de experiencias pasadas, algunas de ellas negativas o traumáticas. Esto me recuerda lo que hace años leí en un libro de metafísica que en aquel momento me impactó: SOMOS PASADO, VEMOS PASADO, SENTIMOS PASADO. Continuamente le preguntamos al pasado si podemos hacer o conseguir tal o cuál cosa. El insconciente en su mayoría es el pasado, un pasado dudoso del que no sospechamos. Los cambios profundos consisten en ir reconstruyendo esos mapas mentales. Hoy en día, la neurociencia nos cuenta que no se borran los mapas mentales pasados, pero sí es posible crear nuevas rutas inconscientes, hacer un nuevo cableado mental que con el uso vaya automatizándose y siendo una buena ruta de viaje. Y sí, la idea que por ignorancia se dice de "vamos piensa en positivo", se desmorona cuando comprendemos lo anterior, la negatividad está en nuestros mapas inconscientes…Por eso nos podemos hartar de cambiar un pensamiento negativo por uno positivo y comprobar desesperadamente que nada cambia. Lo que sí que la ciencia nos dice y que puede alentarnos es que crear mapas mentales positivos es posible. Así que deja tus mapas antiguos a un lado y crea nuevos mapas más adecuados para la vida de un mañana más óptimo.
Joe Dispenza:"Cambiar es una palabra poderosa y es completamente factible si la eliges. Cambiar significa ir más allá del entorno, el cuerpo y el tiempo. Podemos hacer que el pensamiento sea más real que cualquier otra cosa, y lo hacemos a diario. Si estamos conduciendo por una carretera, pero concentrados en nuestro pensamiento, no vemos la carretera, no sentimos nuestro cuerpo y no sabemos cuánto tiempo ha pasado. Ese estado es el que utilizamos para crear. El verdadero cambio está en ser más grande que las circunstancias de tu vida, o somos las víctimas de nuestra realidad o somos los creadores."
4. "La mayoría de las personas piensan en sus problemas en lugar de pensar en las posibilidades".
Nos han enseñado a darle vueltas a los problemas, a analizarlos y juzgarlos pero pocas veces nos han explicado que la solución a eso que nos ocupa no puede estar en el mismo sitio. Si sólo miramos para allí estaremos en el lugar perfecto para no perder detalle de ese punto negro pero perderemos de vista el amplio paisaje de las posibles soluciones. El problema y la solución no están nunca en el mismo sitio. El problema nos propone un posible cambio y la solución o soluciones serían los posibles caminos a transitar. Pensar en el problema nos mantiene estáticos y nublados, por no hablar de que dónde ponemos la atención hace crecer eso en lo que te estás enfocando. Las soluciones son aperturas a algo generalmente distinto, son avances, alternativas y opciones.
El problema nos invita a observar lo que está pasando y desde ahí preguntarnos qué puedo hacer con eso, cómo puedo avanzar y qué opciones me surgen.
5. "Vivir en un estado de agradecimiento es vivir en el estado ideal de recepción".
El acto de agradecer es un acto de apreciación que nos llena. Cuando sentimos gratitud, nos sentimos completos, confiados y con recursos para afrontar cualquier circunstancia. Agradecer es abrirse a la vida, por eso estamos en estado de recepción. Desde hace tiempo, el agradecimiento se ha convertido en uno de las mejores herramientas para trabajar la mente, porque más allá de ese encuentro con la espiritualidad que nos puede brindar, es una manera muy productiva para romper patrones de alerta o ansiedad y expandir la mente, huyendo de patrones de escasez. Por eso recibes abundancia.
Hacer recuento de las cosas buenas que nos pasan y poner el foco en esos pequeños detalles que nos sacaron una sonrisa o nos proporcionaron un momento agradable, hará que la mente sea más objetiva y se estará programando para crear más momentos mágicos. Eso es lo que me dicen mis clientes cuando trabajamos el agradecimiento, al saber que van a tener que apuntar esos pequeños momentos de gratitud, se sorprenden disfrutando de ciertas cosas que antes no percibían y pensando que es algo para incorporar en su cuaderno de gratitud.
6. "Meditación significa familiarizarse con… Si haces consciente tus pensamientos y tus hábitos automáticos y observas las emociones, empiezas a objetivizar tu mente subconsciente".
Me ha encantado esta definición que hace Joe Dispenza del acto de meditar, nunca me la habían presentado con la palabra familiarizarse, sin embargo creo que es acertada. Cuando meditas, te haces observador de la mente, de los pensamientos y emociones, te familiarizas y te responsabilizas con lo que allí ocurre. Hacemos consciente lo inconsciente y es ahí donde con curiosidad observamos y escuchamos para poder cambiar.
¿Y cómo cambiamos? Debatiendo la conveniencia o beneficio de esos hábitos automáticos para alcanzar la vida que queremos. Así se crea la objetividad.
7. "Si decides quién quieres ser, cuál es el gran ideal de ti mismo, qué pensamientos quieres tener, qué conductas quieres demostrar, qué emociones quieres experimentar. Si te recuerdas cada día quién ya no eres y quién quieres ser y empiezas a pensar en nuevas formas de ser...
Cuánto más pienses en ello y más lo planifiques, más estás instalando los circuitos en el cerebro".
Una gran verdad es que vemos natural invertir parte de nuestro tiempo ideando nuestras vacaciones, lo cual está muy bien, pero no tomamos la misma consideración en el viaje más largo que vamos a hacer: LA VIDA.
¿Por qué somos conscientes de la importancia que tiene elegir el destino (meta) y planificar las actividades (plan de acción) para aprovechar lo mejor posible nuestras ansiadas vacaciones y no planificamos así la vida, teniendo en cuenta que nos pasamos ahí el total de nuestro tiempo?
¿Ideas tu vida o dejas que la vida te lleve? ¿Eliges quién quieres ser o eres lo que te marcan las etiquetas? Si no trazas las metas, estás caminando sin camino. Si además no tienes plan de acción, vas sin rumbo, a la deriva y con las etiquetas de un pasado que te impedirán ver el presente y hacer un nuevo futuro. Recuerda, que como dijo Ortega Y gasset no somos participios, sino gerundios. Nos estamos haciendo, estamos "siendo", somos evolución y transformación, por eso necesitamos ponernos al mando de ese destino.
8. "Cuánto más te observes a ti mismo menos serás tú mismo". "El conocimiento es poder pero el conocimiento sobre uno mismo es autoempoderamiento".
Reconozco que a veces las frases de nuestro personaje son de tal profundidad, que se convierten en un trabalenguas que a muchos les chocará. Y justo por eso mi primer contacto con su libro "Deja de ser tú" vino a tambalear algunas de mis creencias más limitantes sobre mí misma para como bien dice él, CAMBIAR.
Esta frase es ingeniosa y maravillosa, "Cuánto más te observes a ti mismo, menos serás tú mismo". Es un juego de palabras que viene a colación de lo que hablaba anteriormente cuando nos decía que meditar es familiarizarse con… y que en el proceso de observarnos objetivizamos la mente. Cuánto más nos observamos, en mejor disposición estamos de reconocer patrones y hábitos limitantes. Conocerse es poner luz en ese inconsciente desconocido para saber que podemos cambiar aquello que no nos gusta o no resulta beneficioso. Observarse es un acto de responsabilidad que nos permite tener más confianza en nosotros mismos. Nos autoempodera.
Joe Dispenza dice que "una atención clara y una emoción elevada cambian el destino, pero requiere disciplina". En internet podrás encontrar sus meditaciones gratuitas para trabajar tu mente.
9. "Si no puedes superar tu estrés, tus problemas y tu dolor, no puedes crear un nuevo futuro donde esas cosas no existan".
Se dice que para salir de la enfermedad hay que enfocarse en la salud, para dejar el estrés o la ansiedad hay que abandonar el miedo y empezar a crear momentos de paz y confianza. Para salir del modo problema, es necesario llevar la atención a lo que puedes hacer u otros hicieron en esa misma situación (activar el modo resolver). Nuestro cerebro está diseñado para poner atención en aquellas cosas que sostienen nuestra supervivencia, gracias al llamado SARA (sistema activador reticular ascendente), este mecanismo selecciona entre todos los estímulos que recibe del exterior aquellos que son interesantes para el individuo. Este proceso se hace de forma inconsciente, por eso cuando vamos a tener un hijo, empezamos a ver carritos, mujeres embarazadas, familias…Eso ya estaba ahí antes pero no era de nuestro interés. De igual manera si te diagnostican una enfermedad, este sistema te traerá información sobre otras personas que también la padecen y empezarás a ver noticias sobre ello. Esto está bien pero para cambiar la enfermedad hay que poner a funcionar el SARA hacia la salud, que es nuestro propósito.
Joe Dispenza cree que la mente se manifiesta en el cuerpo, una mente limitada crea un cuerpo enfermo, vive en esas emociones pasadas, experienciando los bloqueos del pasado. El cuerpo puede aprender a vivir más del presente y en la presencia del cuerpo tornaremos la mente. Así lo expresa él:
"Si podemos enseñar al cuerpo a confiar en el futuro y vivir en la alegría, creamos nuevas conexiones".
10. "El campo cuántico tiene una realidad donde eres feliz, debes ir a por tu realidad ahora. La realidad ya existe como posibilidad en el campo cuántico, sólo espera a que la observes. Mantén la clara intención de lo que quieres, pero deja que el imprevisible campo cuántico se ocupe de los detalles. No interfieras. El campo cuántico no responde a lo que queremos sino a quién estamos siendo".
Este último párrafo me parece precioso y esperanzador. Si aún no sabes quién es Joe Dispenza, te animo a ver su documental o mirar alguna ponencia de Youtube. Si después lees alguno de sus libros, seguro que le encontrarás sentido y verás que todo está plasmado desde la ciencia.
Reconozco que sus afirmaciones pueden parecer un tanto esotéricas, es más, he de confesar que fue uno de los personajes que inspiran que más me ha costado escribir. Hubo momentos en los que estuve a punto de no incluirlo, pero luego me parecía por mi parte poco grato dejar en el tintero a alguien que aporta tanto al crecimiento personal y por qué no admitirlo, tanto a mi autoconocimiento y mi autoempoderamiento.
Resaltaría que todos tenemos ya dentro de nosotros una versión de felicidad, paz, confianza, capacidad, amor, bienestar y salud. En algún momento todos lo hemos experimentado y ha sido posible porque ya somos eso. Y sé que somos en esencia eso, porque cuando experimentamos esos estados, nos sentimos poderosos, calmados y con la sensación de "estar en casa". En cambio, cuando percibimos lo contrario, nos sobreviene una sensación de miedo y de "estar perdidos", porque nos alejamos de nuestra verdad. Ahora mismo estamos en una realidad y la física cuántica nos invita a adentrarnos en ese campo cuántico de infinitas posibilidades, donde por supuesto ya está la posibilidad de felicidad y abundancia. Nosotros tenemos que lanzarle a ese universo confiadamente aquello que queremos, pero dejándole a él que afine los detalles, ya que él es ilimitado y ahora mismo nosotros obramos con limitación. El universo no responde a nuestra verdadera esencia sino a lo que nos creemos que somos y cómo actuamos.
Con confianza todo llega, porque todo está:
"Sé empoderado, sé libre, sé ilimitado, sé creativo, sé divino, eso es lo que eres. Una vez que te sientas así memoriza este sentimiento; recuerda este sentimiento. Esto es lo que realmente eres".
Joe Dispenza.
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